El nuevo álbum se llama Niña Calavera y se presentará oficialmente en Sala Magnolio el 19 de agosto.
“Niña Calavera” por Fernando Santullo.
Chicas Japonesas se mueve por el borde, camina siempre por la cornisa. Lo hace pisando la zona de cruce entre lo que se conoce como spoken word, el rap, el trip hop, el rock, el tango y la milonga. De ahí que sus canciones tengan ecos diversos, no solo en lo estilístico sino también en lo temporal. Música y poesía traen consigo resonancias de finales de los 90, de la primera década de los dos miles, conviviendo de manera natural y orgánica con sonidos paridos anteayer.
Inequívocamente rioplatense (o uruguayo, para los celosos de las fronteras) Chicas Japonesas es la creación de Gabriel Richieri y Gabriel Córdova. Ambos tienen una extensa trayectoria artística a sus espaldas, Richieri como poeta y performer, Córdova con su vieja banda, La Rosa Mosqueta, que sonó bastante en la primera mitad de los noventa. Como dúo y como banda, Chicas Japonesas vienen tocado desde hace ya varios años en diversos escenarios de Montevideo, solos o acompañando a otros artistas.
Aquello que podría sonar declamatorio, en la voz de Richieri se convierte en un flow muy personal, que en algunos momentos es decididamente rapero y en otros, poesía sin más. Evitando, eso sí, la solemnidad, tanto en su forma de decir como en la materia de sus textos. La música, compuesta y producida por Córdova, se instala en esa zona melancólica que existe entre todos los géneros antes mencionados. Es atractiva, jamás compite con los textos.
Algo interesante de “Niña Calavera”, el nuevo trabajo de Chicas Japonesas, es que no apela a uno solo de los tics de moda que suelen superpoblar algunos de los géneros que los nutren, especialmente el hip hop. Al contrario, suena como la evolución natural de lo que han venido haciendo en los últimos años, una suerte de versión turbo de aquello que hemos podido ver aquellos que alguna vez los disfrutamos en vivo.
Actual y a la vez atemporal, Chicas Japonesas agrega en esta ocasión las voces y los textos de la poeta argentina Paula Bader y del exfutbolista y también poeta y performer uruguayo, Agustín Lucas. El sucesor de su disco debut, que ganara el Premio Graffiti al Mejor Album de Rock Alternativo de 2009, amplía la propuesta musical y poética del dúo de Gabrieles y a la vez, la profundiza. Acompañados en vivo por Alejandro Moya (bajo) y Fernando Cid (piano), Chicas Japonesas proponen una música que sin sacrificar lo accesible, rasca en los bordes de lo no transitado. Entre esos bordes se incluye en este disco una muy particular y oscura versión del tema “Hermano te estoy hablando” de Jaime Roos.
